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Mitos sobre el amor y el sexo. (Primera parte)

Sentado frente a mí, en la sala de orientación había un joven afligido con sentimientos a los cuales no les podía dar nombre. Algunas semanas atrás, él había llevado a su novia para que tuviera un aborto.
Todo parecía estar bien en el momento, pero entonces, tiempo después, cuando su abuelo murió, empezó a reflexionar sobre la muerte. En el camino a la casa, después del funeral, vino a él este pensamiento: había matado a su bebé. Fue entonces cuando el mundo se le derrumbó. Algunos amigos, con miedo de lo que podría hacerse a sí mismo, habían llamado al centro de crisis de embarazo y el centro me llamó a mí. Debido a que los grupos de recuperación de hombres no se estaban reuniéndose, me pidieron que trabajara con él uno a uno. Para entonces, ya estaba desesperado por hablar.

Esto era un poco inusual. Sin embargo, con la mayoría de los hombres, el impacto del aborto tarda más tiempo en llegar, durante ese período no están dispuesto a hablar sobre el asunto y tienden a sentirlo de manera diferente a como le estaba pasando a él; por ejemplo, una disminución del sentido de la virilidad. Pero allí estaba él, de carne y hueso, un testimonio vivo de que tener relaciones sexuales acarrea consecuencias.

Nuestra era, supuestamente iluminada, está inundada de mitos sobre el sexo y el amor. Este capítulo cubre mitos generales (en los cuales tanto hombres como mujeres tienen la misma probabilidad de caer), mitos de chicas (en los cuales las mujeres son más propensas a caer) y mitos de chicos (aquellos en los cuales los hombres son más propensos a caer).
Voy a pasar casi la misma cantidad de tiempo en los mitos generales y en los de las chicas, no obstante en los mitos de varones mis comentarios serán aproximadamente el 50 por ciento más largos porque toma más tiempo convencer a los hombres.

MITOS GENERALES
Mito número uno: El amor es un sentimiento y el sexo es la forma adulta de expresarlo.
¿Se ha preguntado por qué cuando las personas se casan, prometen amarse hasta la muerte? Piénsalo. Los sentimientos cambian, no se puede hacer la promesa de tener un sentimiento. Así que si el amor es
un sentimiento, la promesa que se realiza en la ceremonia del matrimonio no tiene ningún sentido en lo absoluto. Sin embargo, el voto tiene sentido porque el amor no es un sentimiento. Entonces ¿qué es? El amor es un compromiso de la voluntad para el verdadero bien de la otra persona. Por supuesto, las personas que se aman por lo general tienen sentimientos fuertes también pero puedes tener esos sentimientos sin tener amor. El amor, repito, es un compromiso de la voluntad para el verdadero bien de la otra persona.
Ahora la expresión externa y el sello de un compromiso de la voluntad es una promesa vinculante. Así que la forma adulta de expresar el amor es entrar en una promesa de unión: el matrimonio. “Si realmente me amabas”, dicen algunas personas, “tú lo harías conmigo.” ¡Tonterías! Si realmente te quisiera, él no te lo exigiría. Si realmente te amara, ella tampoco te lo pediría.